miércoles, 3 de enero de 2018

Primera tanda de microrrelatos

Con el fin de ir refrescando la memoria, os ofrecemos los cuatro primeros microrrelatos a concurso. Pinchando sobre el título, accederéis a ellos:

1. In memoriam




martes, 2 de enero de 2018

A ESTAS ALTURAS
A mí, a estas alturas, pedirme un relato. Yo que he sido, y soy, uno de los mejores autores vivos del siglo. Con reconocimientos, premios y galardones de todo tipo. Nominado al Nobel en tres ocasiones (no recibido por avaricias y rencores de un trasnochado jurado). A mí, con millones de ejemplares vendidos, traducido a más de treinta idiomas. A mí, alabado por crítica y público. Yo, que ahora, ya pintando canas, solo me dedico a dar conferencias magistrales sobre el arte de la escritura, se me solicita para escribir un breve relato, con un número determinado de palabras e incluyendo dos elegidas al azar por no se sabe quién. A mí, ignífuga pluma que será recordado en años venideros como el relumbrón de las letras españolas… un relato… breve……incluyendo dos palabras:    receta   mariposa
¡Por favor!

"Sueño"

SUEÑO

“He cogido piojos otra vez”. Los malditos niños de este colegio son como gominolas para estos parásitos. Mi costumbre de llevar el pelo largo y de acariciar la cabellera de mis alumnos cuando responden afirmativamente y con solicitud a mis preguntas me hace ser un hombre-piojo. Y, ciertamente, todos lo somos. Miremos a nuestro alrededor: multinacionales, enormes firmas financieras, medios de comunicación y marketing feroces, políticos de cuatro chavos…todos quieren lo mismo: chupar. Nos liban hasta las ideas. Para relajarme voy a cocinar mi receta preferida: un par de huevos fritos con puntillas. 
Abro los ojos. Me pica la cabeza. Otra vez este maldito sueño. Piojos, niños, política y huevos fritos. Quizás debería cambiar la almohada. O el colchón. O leer más y ver menos los espantosos noticieros. Me arrastro a la cocina, pronto llegarán los invitados y tengo que preparar mi postre estrella: pastelitos de mariposa.

Luz de mariposa

LUZ DE MARIPOSA

Las cortinas están siempre echadas. La luz es tenue. El ambiente es físicamente aséptico. Las enfermeras revolotean de cuna en cuna, que asemejan crisálidas abiertas con brazos que emergen hacia máquinas que despiden luces verdes, rojas, naranjas. Casi el único color del recinto, salvo el blanco lechoso de paredes y mobiliario. Cada cierto tiempo y con un estricto control los padres acceden a ver a sus retoños, con sus miradas perdidas en tubos, cables, y entre ellos, su hijo.
En el pasillo dos abuelas conversan calladamente, mostrando orgullosas sus arrugas y sabiendo que el bebé viene a sustituirlas en un breve lapso. Comparten sus recetas de vida, sus historias de amor y desamor con sus hijos y allegados. Hablan sin escuchar, necesitan ser oídas ahora que el tiempo va en su contra.

Perezoso en su respirar, somnoliento en el vivir, el bebé espera plácidamente la luz de una mariposa.

lunes, 1 de enero de 2018

Modo de votación y premios del concurso.

Acabada ya la fase de presentación de microrrelatos, os recuerdo el modo de votación, tal como venía expresado en las bases, y los premios para los ganadores. Os recuerdo también que si alguien no puede asistir el día 12 a la librería Códex, puede efectuar su votación en el correo iesmirogabriel@gmail.com

El funcionamiento de la votación se expresa en el punto 6 de las bases:


6.- El jurado estará compuesto por los miembr@s del club de lectura. Cada miembro votará cinco microrrelatos, con una puntuación de 1 a 5 puntos, siendo 5 el que más ha gustado y 1 el que menos. La votación se llevará a cabo una vez que el plazo de entrega haya finalizado. El periodo de votación será de 12 días desde ese momento. Aquel microrrelato que obtenga más puntuación será el ganador.
Cada participante no podrá votarse a sí mismo.


Y el de los premios en el punto 8:

8.- Premios: Un ejemplar de la autora o autor ganador del premio Nobel en 2017, Kazuo Ishiguro, para el microrrelato más votado (Patrocinado por Librería Códex). Un ejemplar de la autora o autor ganador del premio Princesa de Asturias de las Letras 2017, Adam Zagajewski, (Patrocinado por la Biblioteca Fernando de Loaces), para el segundo microrrelato más votado. Un ejemplar de la autora o autor ganador del Premio Nacional de Narrativaen 2017, Rosa Montero,  (Patrocinado por el Club de Lectura), para el tercer microrrelato más votado.

"A pedir de boca" es el número 20 y el microrrelato que cierra esta edición

A PEDIR DE BOCA



Esa mañana, cuando la televisiva cocinera Julie Andrieu se dirige a L’Aveyron en su cabriolet rojo, descubre un lugar de reminiscencias medievales, ideal para desconectar.

Su encuentro con Jérôme anoche fue sumamente desagradable. Estuvo grosero, cruel. Pero su programa gastronómico la llevaba hoy lejos de París, de su apartamento en la avenida Montaigne, de su discusión con aquel desagradecido haragán, para descubrirle a sus “fidespectadores” este encantador paraje, cuna del Roquefort.

Para el banquete, Julie ha preparado de madrugada unos filetitos ahumados que encajarán maravillosamente con el aligot averonés. Lleva con ella su grande casserole y, a ratos, la mira de reojo. Las lágrimas escapan al aire, en una homogénea mezcla de arrepentimiento, miedo y velocidad.

Al parar en el rocoso refugio, una mariposa se posa en su coqueto carnet de recetas. Es entonces cuando siente que todo saldrá a pedir de boca. No hay nada que un flambeado no pueda hacer pasar por ternero, cortado a cuchillo de Laguiole…



"Vuelo final" se convierte en el 19

Vuelo final

Harry, el mariposa, se ganó su apodo en la clase de química del señor Finley. Tras exponer brillantemente su proyecto sobre recetas navideñas a base de sales minerales, salió tan ufano hacia su sitio que no pudo esquivar el pie de John, el chacal, realizando un vuelo hasta el suelo del aula que no envidiaba al de los bellos insectos multicolor. A partir de ahí la mofa fue continua, incidiendo en que, más que mariposa, era un gran capullo del que, seguramente, habría nacido y todavía no se había desprendido. Harry fue apocándose día tras día, agriándose en su carácter y revistiéndose de una coraza que lo aisló del resto de compañeros. Solo una mañana de primavera, se volvió a dirigir a ellos. Fue aquella en la que ataviado con un extraño cinturón, les invitó a volar por los aires, tal como lo hizo él en clase del señor Finley.

"Mesa de operaciones" es el 18

Mesa de operaciones


Sus caras lo reflejan: algo les preocupa y no sé qué es, pero tiene que ver conmigo. Entre gritos, se mueven violentamente y se intercambian consejos sin encontrar la receta idónea. Yo, mientras, tumbado boca arriba, estoy a su merced, zarandeado por mi destino. Berreo cuando agitan mis piernas, que siento sin control. Me tranquilizan con términos que no comprendo y con fingidas sonrisas que no me apaciguan. Por fin, veo que encauzan sus acciones con algo de sentido, como si hubieran recordado el objetivo que nos ha llevado a esta mesa de operaciones. Con agilidad, lanzan a la papelera lo que sobra de mi cuerpo y, ahora sí, como si de un sucio gusano se tratase, empiezan a convertirme en una estilizada mariposa. Sus caras, ya relajadas, convienen en darme el alta, sin más medicina que un atadijo que la anciana llama gasa y que, presiento, pronto mi estómago volverá a ensuciar abundantemente.