viernes, 30 de diciembre de 2016

"Luna nueva" es el número 18

Luna con faro, de Joseph Wrigth
Luna nueva


Tenía que haber mirado el calendario.

Prometo que será la última vez que se me ocurrirá ir de fiesta y no fijarme en el almanaque, especialmente, en esos símbolos absurdos que marcan los ciclos lunares. En la próxima ocasión, los ojearé con atención, sobre todo, antes de meterme (decidido, arrogante, cazador) en la selva de pubs de mi ciudad una Nochevieja como la de ayer, lóbrega, confusa, irreal. Tanto que me resultó muy fácil acercarme a aquella chica solitaria de la barra; invitarla a unos chupitos; charlar animadamente sobre todo y nada; convencerla de que nos saliésemos fuera (¿qué tenemos que ver tú y yo con esta chusma?); adentrarnos en la oscura luna nueva con la conciencia tranquila y el ánimo excitado; explorarnos, finalmente, el uno al otro, y comprobar que, en lugar de un  precipicio de placer, me topé con una perpendicular enhiesta, infinita, tan masculina que todavía hoy no puedo - ni quiero-  olvidar. 

jueves, 29 de diciembre de 2016

"Virgen selva" ¿será el último en concursar?

VIRGEN SELVA

Luna sobre Hawai de Al Hogue
Aún se ruboriza al recordarlo.

Rafael fue siempre parco en palabras y gestos, aún siendo un hombre atractivo y de porte atlético. Se acercó al grupo a través de Pedro, un chaval hiperactivo y bastante caótico; el primero en fumar, en emborracharse, en conducir, en enamorarse hasta las trancas, en tener relaciones…según el mismo contaba. Pero Rafael era distinto, barajaba sus palabras antes de lanzarlas, mantenía un silencio ambiguo antes de emitir su conformidad, o no, ante una discusión, acostumbraba a cruzar sus manos ante su cuerpo como defendiéndose de no se sabía qué. Y esa actitud fue lo que me atrapó de él.
Comenzamos a separarnos del grupo, a quedar en vernos nosotros solos, a pasear buscando nuestras manos, o mejor todavía, el roce fortuito de nuestros cuerpos…
Aún me ruborizo al recordarlo.
Fue nuestra primera vez y dijo:
                                                    “Quisiera ser eternamente la sonrosada luna de tu virgen selva”.


martes, 27 de diciembre de 2016

"En la selva oscura", es el número quince

En la selva oscura


Lunar, de Halo Norway
Entro a ciegas y sin esperanza en esta selva oscura, donde junto a otros no alumbro destino. Navego con rapidez, consciente de que debo ser el primero, pero ¿para qué? Contemplo con pena a los que desisten y se doblegan, a los que devienen en bucles, a los que intentan retroceder, pero los juzgo sin clemencia al saberlos habitantes de un olvido seguro. Cuando ya quedamos pocos y la bruma es el único horizonte, a lo lejos, en espejismo, aparece limpio y seductor el círculo que guía mi ser y cobija mi  futuro. Asumiendo el último esfuerzo, me lanzo contra su centro, aceptando que, al atravesarlo y confundirme con él, seré otra cosa, otro ser que despertará sin recuerdo alguno de mí dentro de nueve lunas.

"Teresacto", relato a concurso

TESERACTO

Luna de Ibiza, de Helena Tormo
He visitado tantos mundos. He consumido planetas enteros por el mero capricho de poder hacerlo. He devorado lo que se me ha antojado, porque todo es mío, y puedo y quiero hacerlo. Acabo de llegar a uno nuevo, y, como siempre, he recorrido sus valles, montañas…es llamativo verlo desde el espacio, con un tono azul intenso, cubierto de vapor blanco que cambia fugazmente su imagen, como si un pintor no definiera las formas que expresa y necesitara estar retocando su obra constantemente: una obra inacabada.

Me he detenido en sus zonas áridas, pero son como muchos otros planetas, roca y arena, y he paseado por extensas zonas verdes que quienes las habitan la llaman SELVA…he acariciado su vida, su diversas especies y he soñado como hacia milenios que no me ocurría. Y tras el sueño he levantado la vista y asomaba entre el ramaje una intensa luz blanca, que bañaba ese sueño, la llaman LUNA.

lunes, 26 de diciembre de 2016

"Efecto mariposa", nuevo relato participante

Efecto mariposa

Luna en la noche, de Duest
Los rayos de aquella magnífica luna se filtraron a través de los cedros y caobas y alcanzaron el hueco de la gran ceiba donde aun dormitaban perezosamente los murciélagos. Asustados por la claridad, despertaron echando a volar torpemente; sus gritos alertaron a los tucanes y a los loros que, a su vez, empezaron a chillar y a volar. Tal murmullo alcanzó a las luciérnagas que brillaron todavía más. Las mariposas batieron sus alas multicolores y abandonaron las orquídeas y pasionarias donde se posaban.
Una suave brisa y el aleteo de los búhos y lechuzas alarmados, agitó las lianas llegando la clara luz hasta los chimpancés que empezaron a lanzar cocos y plátanos por doquier, divertidos y encantados por la creciente algarabía. Los camaleones asustaron a las ardillas, y los armadillos y okapis emprendieron una carrera desenfrenada asustando a los grillos y a las serpientes de cascabel…

Aquella noche, París -¡perdón!- la selva era una fiesta.

martes, 20 de diciembre de 2016

"Monólogo Nocturno"

La luna, anónimo
MONÓLOGO NOCTURNO

La luna ilumina nuestros pasos temblorosos mientras ellos nos acosan como si, además, les diéramos asco. Al menor intento de aproximación, incluso aunque estemos quietos, nos quiebran de forma inhumana. ¡Quién lo diría! Tanta confusión reina en la noche que mi pensamiento es ahora muy elemental. Precisamente yo, que fui un estudioso, una eminencia en informática, códigos y enigmas, todo lo que alcanzo a deciros ahora es que ellos son malos. Sin más. Porque el miedo paralizador atenaza nuestra marcha cuando vemos sus cuerpos veloces por esta selva del asfalto. Y es que el mundo se ha vuelto loco, hasta mis hijos me agreden. Y ya no recuerdo bien el pasado. Solo conservo un hilo tenue de la memoria, de cuando fui feliz con ellos en los brazos y me los hubiera comido a besos.

Ahora también me comería a todos los vivientes, pero no se dejan los malditos. Nos disparan y corren.  

"Perplejidad"


El latido de la selva, de M. Óscar Menassa
PERPLEJIDAD

El sabor dulce y jugoso de la carne del antílope le resultó suculento. Había arrastrado el cuerpo exánime a una horquilla del baobab para devorarlo tranquilamente, lejos de los depredadores de la sabana. Desde su atalaya contemplaba el borde de la selva, una muralla verde que se perdía en la lejanía. De pronto, el viento le trajo unos sonidos extraños, unos aromas desconocidos. Descendió del gran gigante arbóreo y se internó en el laberinto de lianas y espesura que era su hogar. Por un sendero de elefantes desfilaba una hilera de seres extraños, escandalosos, que parloteaban como los micos. Jamás había visto a ningún animal tan imprudente y descuidado. Pero la curiosidad le azuzaba y después de seguirlos durante varias horas, espero a que alguno quedara rezagado. Entonces se abalanzó sobre él y le desgarró la yugular con sus afilados colmillos. Tarzán se sorprendió de cuánto se parecía a sí mismo aquel ser que agonizaba bajo la sangrienta luna.  

"Amor imposible"

Mujer desnuda en la playa, de Antonio Berni
AMOR IMPOSIBLE

A veces, en el paseo o en la clase entras en mi vida  sin saberlo y cuando sales, entristeces de sombras mi amor inadvertido, este disimulo sin consuelo, esta selva asolada por vientos negros, por noches sin luna, por pena desatada. A veces, por un instante solo, durante un segundo que parece el universo, que parece un amontonamiento de olas y de gozo originario, el espejismo del amor me congracia. Quisiera retenerlo y encadenarlo muy adentro, pero la realidad de ojos  turbios y fauces abiertas ahuyenta el sustento ilusorio, el dulce aturdimiento. Entonces, sin otro porvenir que el hielo negro y la escarcha, busco el camino duradero que de todo se aleja.



"Solución desorbitada", nuevo relato.

Selva tropical, de Rodríguez Cuevas
SOLUCION DESORBITADA
El silencio de su mente contrastaba con la vorágine de la selva exterior, precisaba concentración, se negaba a asistir impasible ante la realidad afectada por una problemática de graves consecuencias.
Necesitaba un plan para rescatar a la generación de sus hijos de las garras de una sociedad seriamente influenciada por unos medios de comunicación perversos, que la habían conducido al pensamiento ausente.
Había soñado con una sociedad libre, donde florecieran la cultura y los valores.
Afortunadamente, del efecto nocivo de esta noxa, se habían librado algunos jóvenes luchadores que aprovechando las posibilidades y los conocimientos que le ofrecía una sociedad libre, desarrollaron la capacidad creativa de su cerebro en el terreno de la investigación, la poesía y el arte .
Debía encontrar una solución efectiva, fantástica y universal.
De pronto, su energía mental adquirió una incalculable intensidad, que transformándose en radiación cósmica lo envolvió, sometiéndolo a una fuerza centrífuga incontrolada que lo transportó a través del espacio hasta la luna, desde aquí, se dijo este utópico librepensador: ¡podríamos cambiar el mundo!


martes, 13 de diciembre de 2016

"Al inicio". Otro relato más


Al inicio
Del nido a la luna, óleo de Jacanamijoy
La tarde se presentaba calurosa y asfixiante como de costumbre.
El aire, irrespirable, provenía del desierto sahariano pero no aliviaba la pegajosa humedad que incitaba a no moverse lo más mínimo a pesar del insoportable ruido circundante producido por los pájaros multicolores de espléndidas y exuberantes plumas que aleteaban sobre las ramas de la pequeña selva de plantas tropicales y palmeras. Allí los habían encadenado para que no echaran a volar huyendo de los dos tigres y el orangután que dormitaban indolentemente a los pies de los pequeños árboles.
Los camellos, sin embargo, andaban inquietos ante la algarabía y el ir y venir de saltimbanquis, bailarinas, guerreros y animales exóticos.
Parecía imposible que aquel maremágnum pudiera organizarse. Pero solo tuvo que hacer una pequeña señal el gran embajador para que las huestes de la Media Luna se unieran hombro con hombro al son de los timbales y la carroza de aves tropicales abriera el desfile.

Nuevo relato: "Cuadro"


Cuadro

Luz de luna, óleo de Javier Bedoya
Lo sé, es imposible.
Pertenecemos a mundos tan distintos…
Y solo puedo contemplarla en esos fugaces minutos del atardecer en que nuestros destinos se unen cada día. Desde el momento en que llegó de su húmeda selva americana me cautivó con su penetrante y sutil perfume, su blanca y rosada faz en forma de corazón, sublime, acurrucada en su rincón, apenas se mueve para enredarse en ese aura embriagadora que la envuelve cada la noche.
¿Cómo yo, tan vital e inquieto, tan duro y enérgico, acostumbrado al aire y la luz podría llamar su atención?
Y luego está ese seductor de Don Diego, crápula nocturno, que no ceja en su empeño y ¡no se despega de su lado! A la más mínima brisa se abalanza sobre mi flor de luna.
¡Ay! Si, al menos, el pelirrojo de los pinceles nos uniera en un mismo jarrón, permaneceríamos juntos hasta la eternidad:
Sunflowers and moonflowers”


jueves, 8 de diciembre de 2016

"Licantropía" también participa en nuestro concurso

Licantropía


Vicisitudes II, óleo de Jesus Guerra
Ni subido a una escalera conseguiría besarte. Quizás ni subido al árbol más alto de las selvas que habito. Sólo me queda mirarte y anhelar tu palidez. Sólo me queda acariciarte desde la lejanía, durante los escasos días en los que ocupas el firmamento de mis noches. Sólo me queda llamarte con borrascosos aullidos. Sólo humillarme a ti, dejando que tu influjo me cubra de grises guedejas. Sólo me queda, y nada más, ofrecerte, como antes y como siempre, una víctima sagrada. Un pulcro cuerpo como el de esta joven doncella que te haga más redondeada, más nívea, más luna.  

miércoles, 7 de diciembre de 2016

Luz de luna, nuevo microrrelato

LUZ DE LUNA

Chiaro di luna, óleo de Salvo
Salgo a la terraza dejando atrás el bullicio de la fiesta. Confusa, pongo mis ojos en un denso nubarrón que cubre la que era una espléndida luna.
¿Y si no volviera a salir nunca más?” –me pregunto- “¿Podríamos soportar estas oscuras noches?”.
Eres cómplice de secretos nocturnos, veladora de sueños, compañera de soledades y desamores, haces brillar con misteriosos tonos todo lo que tocas con tu lánguida luz blanca, musa de poetas y músicos… Sin tu inspiración no nos habríamos podido emocionar con el Claro de luna de Beethoven, ni tararear el Moon River con Audrey Hepburn…
¡Cuántos -artistas o no- hemos caído bajo tu enigmático influjo, cantado, reído, llorado en tu presencia… Se ha bailado y se han atravesado selvas recónditas bajo tu luz y tu sombra, …, Manet, Van Gogh, Munch, Kandinsky, Dalí… nos han dejado obras inigualables donde eres la indiscutible protagonista…


¡No dejes de brillar todas las noches, querida luna!”

jueves, 24 de noviembre de 2016

"Amigas", nuevo microrrelato a concurso

AMIGAS
Leyenda de Yací y Araí (jóvenes que simbolizan
 la Luna y la Nube en la mitología guaraní). Óleo anónimo
Hacía 70 años que la luna no se veía tan majestuosa y tan bella. Anoche sus rayos entraron a través de los cristales y se coló en casa de Luna, su tocaya. Parece ser que estuvieron hablando mucho tiempo. Seguramente tendrían que hablar de muchas cosas. Dicen algunos que el Astro vino a llevársela. Esta mañana ha aparecido sin vida a los pies de la madreselva de su jardín, su refugio. Ella no supo elegir, sólo se encaprichó de un cuerpo. Cuentan las vecinas que sus ojos, que en otros tiempos brillaban como dos luceros, se habían apagado y estaban tristes y llorosos. Se cuidaba cada vez menos y se pintaba cada vez más. Dicen que lo único que se oía a través de las paredes eran portazos, gritos, ruidos de botellas y de algún que otro plato estampado en el suelo. En el bolsillo de su vestido, una nota decía:” ¡Ya no puedo más!”


martes, 15 de noviembre de 2016

"La sangre altera", nuevo microrrelato a concurso

Luna de selva, óleo de Salvador Rosado
En la selva, la inmensa selva, hoy ruge el león. Los elefantes barritan pateando desalados. Las tórtolas, las palomas y las alondras zurean como posesas. Van los asnos suspirando reciamente por las asnas. Los ciervos braman consumidos por el fuego de la pasión. Mientras, los patos parpan amartelados en los estanques cristalinos. Las serpientes silban retorciéndose de lujuria. Los cuervos, las cornejas y los tordos graznan para demostrar a las raposas que se puede tener una voz horrenda y estar perdidamente enamorado. Los conejos sonríen musitando palabras de amor. Los coyotes solitarios aúllan rodeados de cactus y espejismos. Las lechuzas, los búhos y los mochuelos ululan enloquecidos por el deseo… y para aumentar el pandemónium, un coro de grillos canta, rabiosamente, a la luna…
Dios mío… ¡La que me espera!— se dijo Noé abrumado— ¿A quién se le ocurre desencadenar el Diluvio en primavera?

lunes, 14 de noviembre de 2016

"Viento"

Aquí va el segundo microrrelato, con el título de "Viento".

Luz de luna, de Martha Arbeláez, (óleo sobre lienzo)
VIENTO
En el café La Selva nos encontramos tú y yo al anochecer. Fue por casualidad. Tú, con tus botas de media caña y tu falda escocesa con un suéter a juego con la boina, te tomabas un chocolate caliente para suavizar la temperatura otoñal. Yo entré para refugiarme del viento y tomar un café; fue cuando te descubrí y me quedé prendado de ti. Estabas fumando un Peter Stuyvesand y el aroma del tabaco y tu perfume me atrajeron hacia ti. ¿Tienes fuego? – Si. - ¡No me digas que tú también eres española!

Dimos un paseo por los Campos Elíseos. Cada vez que te rozaba sentía que me estremecía. Y ¡qué graciosas las hojas de todos los colores del otoño secas en el suelo! Nos invitaban a bailar con ellas. De repente, estábamos enlazados acompañados por la música del viento. En ese preciso instante la luna fue testigo de nuestro primer beso.  

"Triste destino", Primer microrrelato a concurso

Por fin!!!!!! Ya tenemos los primeros microrrelatos del concurso de este año. Aunque se han hecho esperar, la calidad, como podéis observar no ha sufrido merma alguna. Empezamos....

Luna y bambú (fragmento de tríptico)

TRISTE DESTINO

Triste y melancólico
por la selva
se arrastraba
un ciempiés,
absorto
en los más tristes
pensamientos.
¡Ay mísero de mi, ay, infelice!
¿Qué delito cometí
contra vosotros naciendo…
miriápodo?”
¡Ay! Quien fuera hipsipila que dejó la crisálida,
¡Quién fuera golondrina, quien fuera mariposa,
y bajo el cielo volar!”
¡Ay! La luna en el mar riela,
en la lona gime el viento…
Y yo aquí,
atrapado en este cuerpo
que me resulta tan difícil y tan caro
de calzar…”

De repente,
amparada en la oscuridad
de la verde floresta,
una hábil mano
se cierne,
empuñando una red,
sobre el erudito artrópodo.

Al sentirse atrapado
exclama:
¡Se acabó para mí
la hora del esplendor en la hierba,
de la gloria en las flores!”
Y dirige una última mirada
hacia el laborioso
escarabajo pelotero
que lo acompaña:
Muero triste, pero
muero más sabio.
Porque
¡teníamos aún
que hablar de tantas cosas,
compañero del alma,
compañero!




jueves, 29 de septiembre de 2016

II Concurso de microrrelatos "La garrapata budista"

Noche tropical, Salvador Rosado
1.- Temática: Libre

2.- Participantes: Podrán participar todos aquellos que pertenezcan o hayan pertenecido a este club de lectura. Se premiarán tres obras.  La participación en el concurso será gratuita e implica la aceptación de las presentes bases. 
3.- Formato: Las obras tendrán una extensión máxima de 155 palabras (sin contar el título), escritas en castellano, en letra Times New Roman, tamaño 12 (formato Word). Obligatoriamente, los microrrelatos deberán contener las siguientes palabras:


LUNA / SELVA


Se admitirán un máximo de tres obras por participante. 
 4.- Forma de presentación: Mediante el envío como archivo adjunto o en el cuerpo del mensaje de los tres relatos a este mail 



 iesmirogabriel@gmail.com

No podrá enviarse ningún dato personal. Habrá que crear un email que no lleve ningún dato que identifique a la persona. Para ello, en los campos de nombre y apellidos, debéis poner palabras que no se relacionen con vosotros.

 Ej:

Nombre: Orihuela    Apellidos: Murcia Lamurada

No habrá plica. Las obras se firmarán con un pseudónimo que no pueda relacionarse con la persona. Cuando se produzca el fallo del jurado, la persona que responda al pseudónimo del ganador deberá identificarse. Se evitará así que el receptor de los microrrelatos (o sea, yo) caiga en la tentación de mirar la plica y descubrir de quién es cada microrrelato antes de votar (Uno es humano). IMPORTANTE: CADA MIEMBRO DEL CLUB DEBE EVITAR QUE SE DESCUBRA CUÁL ES SU MICRORRELATO, A FIN DE CONSERVAR LA PUREZA DEL CONCURSO.



 5.- Plazo de presentación: los trabajos deberán enviarse antes del 1 de enero de 2017.

 6.- El jurado estará compuesto por los miembr@s del club de lectura. Cada miembro votará cinco microrrelatos, con una puntuación de 1 a 5 puntos, siendo 5 el que más ha gustado y 1 el que menos. La votación se llevará a cabo una vez que el plazo de entrega haya finalizado. El periodo de votación será de 15 días desde ese momento. Aquel microrrelato que obtenga más puntuación será el ganador. Cada participante no podrá votarse a sí mismo.

 7.- El fallo del jurado será inapelable.

 8.- Premios: Un ejemplar de la autora o autor ganador del premio Nobel en 2016, para el microrrelato más votado (Patrocinado por Librería Códex). Un ejemplar de la autora o autor ganador del premio Príncipe de Asturias de las Letras 2016 (Patrocinado por la Biblioteca Fernando de Loaces), para el segundo microrrelato más votado. Un ejemplar de la autora o autor ganador del premio Nacional de Narrativa en 2016 (Patrocinado por el Club de Lectura), para el tercer microrrelato más votado.

 9.-Aceptación de las bases: La participación en el Concurso implica su aceptación plena.

sábado, 2 de enero de 2016

Comienzo de la fase de votación

Cebollas de Solero
Llegados a este punto, podemos declarar oficialmente cerrado el periodo de presentación de textos al primer concurso microrrelatos La garrapata budista. A partir de hoy, y hasta el día 15 (hasta la reunión del club de Lectura en Códex), se abre oficialmente el plazo de votación. 
Antes de explicar cómo se va a vertebrar este proceso, creo que podemos concluir que esta primera convocatoria ha sido un éxito de participación, de variedad y de calidad. Al final son 23 los microrrelatos presentados y creo que este número y el nivel de los mismos nos abre la puerta a la convocatoria de sucesivas ediciones.
Agradecer también a Códex la implicación en el concurso aportando el premio del mismo.

El funcionamiento de la votación será el siguiente:
  1. Cada integrante del club, haya o no participado en el concurso puede votar los microrrelatos presentados.
  2. Se podrán votar un máximo de tres microrrelatos, puntuándolos del 3 (el que más haya gustado) al 1. 
  3. La votación se realizará individualmente y se revelará en la reunión del día 15 de enero, después de leer los relatos a concurso. Si alguien no pudiese acudir ese día al encuentro en Códex, puede votar enviando sus puntuaciones a iesmirogabriel@gmail.com
  4. Los relatos pueden leerse en lagarrapatabudista.blogspot.com.es
  5. Para leer los primeros, en la parte derecha hay un menú en el que pone diciembre y enero. Pinchando en el triángulo se despliegan todos los microrrelatos. También se puede acceder pinchando al final de cada página en Entradas antiguas.
  6. La coordinadora del club será la encargada de realizar el recuento.
  7. Si alguno de los participantes no puede acudir a la reunión del 15 de enero, debe enviar un mensaje al email iesmirogabriel@gmail.com indicando de qué microrrelatos es autor. Este email solo se abrirá si el microrrelato ganador no es reivindicado por ninguno de los asistentes a la reunión.
  8. Solo se proclamará un ganador. En caso de producirse un empate, se dará el premio ex - aequo, solicitándole a Vicente que sean dos los ejemplares de Svetlana Aleixandrevich que proporcione al concurso.
  9. Evidentemente, nadie puede votarse a sí mismo.
  10. Además del premio ya mencionado, el ganador tendrá el privilegio a elegir las palabras que serán obligatorias en una futura segunda edición del concurso, indicándolas cuando se publiquen las bases del mismo.
Evidentemente estas bases están abiertas a sugerencias y modificaciones que propongáis. 

En definitiva, un placer haber vehiculado este concurso y felicitarnos por la participación que ha registrado.

viernes, 1 de enero de 2016

Carta a una suricata

Bodegón con cebolla y arenque, V Ferris
CARTA A UNA SURICATA

Amiga suricata:
Hay familias desatentas, familias de psicópatas y luego está la mía. Vive amurallada frente al entorno como un castillo de termitas. Fuera de alguna visita obligada del alma del abuelo, mi grupo nunca se ha preguntado por el sentido de este aislamiento. Pero sí que descansa unido y se prodiga en veladas endogámicas, donde, salvo sorpresa, mi padre termina dormido roncando en la mesa y todos nos hacemos fotos con él y le golpeamos con ramas de baobab y, también salvo sorpresa, no se despierta.
Hoy, hacia el alba, me he alarmado por el fuerte olor a cebolla, pero pronto he supuesto certeramente la presencia en mi alcoba del gordo patudo, mi tío que parece salido de los óleos de Botero y que sufre de ataques hipoglicémicos. Con este panorama, ¿para qué quieres que salga? Anda tú si quieres y déjame que duerma.

Tu amigo suricato.

Itaca

Naturaleza muerta, Claudio Rodríguez Venegas
Itaca
—El Nilo, río sagrado, que prodiga la abundancia de bienes sobre el país de Kami, atrajo hasta sus riberas a las cóncavas naves de los extranjeros de rubias cabelleras. Probaron la cebolla dulce y tierna, la raíz del loto, que provoca el olvido, y decidieron no regresar a su tierra. Pero su príncipe, tan astuto como Thot, los convenció para que continuaran el viaje. Cuentan los hombres dignos de fe que solo el príncipe logró regresar a su patria y los demás perecieron. El Devorador se dio un jugoso festín con los cuerpos de los navegantes que no pudieron ser ungidos con el óleo sagrado…
—Maestro, ¿no hubiera sido mejor para ellos permanecer allí, con los lotófagos, que aventurarse en el mar ignoto?

—Sinuhé, también para nosotros, los tebanos, no hay mayor sufrimiento que saber que jamás volveremos a aspirar el perfume de la Tierra Negra las noches de primavera. Que Amón no te depare esa condena.